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Mostrando entradas de 2021

Cuando te arrojen en un pozo... (Parte 3)

 José estuvo en tres diferentes pozos. El primero pozo fue esa cisterna donde sus hermanos lo arrojaron para después venderlo como esclavo ( Génesis 37 ). El segundo pozo fue la cárcel, acusado injustamente es sacado de la estabilidad que había conseguido en la casa de Potifar y ahora se encuentra en una prisión. Una vez más fueron otros los que tomaron decisiones por él y ahora se encuentra una vez más limitado por las circunstancias ( Génesis 39 ). Aunque me parece que nada le puso limites a su corazón, creo que su fe y confianza en Dios por un momento probablemente se vieron amenazadas, es decir ¿Quién no dudaría? ¿Quién no se preguntaría “Y donde está Dios ahora”? Pero al ver su proceder con el paso del tiempo, es evidente que en medio de toda circunstancia encontró la fuerza en Dios, en su fe y en las promesas que había sobre su vida como para sobreponerse. Probablemente porque se dio cuenta que, a pesar de todo, era evidente que Dios le daba gracia frente a la situación,

Cuando te arrojen en un pozo... (Parte 2)

Estar en un pozo no es agradable. Probablemente estaba oscuro, José no puede ver lo que sucede fuera de la cisterna. No puede hacer nada al respecto, está limitado por las circunstancias, diciéndolo de otra manera. En sus manos no está el control de su propia vida. También me acuerdo de Jeremías, que de igual manera fue arrojado en una cisterna (Jeremías 38 RVC) , y ¿Qué decir de Pablo y Silas con los pies atados en el cepo? (Hechos 16:16-40 NVI) . Quizás te has mirado así. Otros toman decisiones por ti o que te afectan directamente a ti, sin que puedas hacer nada al respecto. ¿Te suena a injusticia? Quizás. Yo puedo pensar en una persona que se encontró así, además de José, Jeremías, Pablo y Silas; hubo otro hombre que estuvo a merced de sus captores. Hablo de Jesucristo. La diferencia entre José y Jesús, es que Jesús se entregó voluntariamente porque esa era la voluntad de Dios. Esto lleva a Jesús a una condición diferente. Él no fue victima de las circunstancias, lo que aquí

Cuando te arrojen en un pozo... (Parte 1)

 ¿Cuántos de ustedes recuerdan esa historia? Los propios hermanos de José el hijo de Jacob, celosos por los sueños del muchacho y el amor de su padre, toman la decisión de matarlo.  Sin embargo, son persuadidos por Rubén para no ser ellos quienes maten a su propio hermano, y por consejo de Judá juntos toman la decisión de venderlo.  Cuando José llega a dónde están sus hermanos, inmediatamente lo arrojan en un pozo (cisterna).  “Entonces, cuando llegó José, sus hermanos le quitaron la hermosa túnica que llevaba puesta. Después lo agarraron y lo tiraron en la cisterna. Resulta que la cisterna estaba vacía; no tenía nada de agua adentro. Luego, justo cuando se sentaron a comer, levantaron la vista y vieron a la distancia una caravana de camellos que venía acercándose. Era un grupo de mercaderes ismaelitas que transportaban goma de resina, bálsamo y resinas aromáticas desde Galaad hasta Egipto. Judá dijo a sus hermanos: -¿Qué ganaremos con matar a nuestro hermano? Tendríamos que