¿Recuerdas
esas palabras del apóstol Pablo a Timoteo?
"...Ejercítate para la piedad" 1a Timoteo 4:7 (RVR60)
Aquí está ese mismo texto en otras versiones de la Biblia
"Más bien disciplínate a ti mismo para la piedad." (NBLH)
"En
lugar de eso, entrénate para la sumisión a Dios." (NTV)
"...más
bien entrénate para una vida dedicada a Dios." (PDT)
"Ejercítate
en una vida auténticamente piadosa," (BLPH)
"Más
bien, esfuérzate por ser un buen discípulo de Jesucristo." (TLA)
Es fantástico lo que uno aprende solo por consultar otras versiones.
Una vida de
ejercicio espiritual, es una vida dedicada a Dios, refleja lo que es un
verdadero discípulo de Jesuristo, es decir, muestra la sumisión a Dios, lo que
hace a un creyente un cristiano autentico.
El ayuno es una ejercicio espiritual, algo sumamente práctico y fácil de hacer, que no solamente tiene beneficios para tu cuerpo.
El ayuno es la interpretación física de tu dependencia de Dios. Es la traducción a un lenguaje tangible de las verdades intangibles y espirituales en las que hemos creído.
Y como todo ejercicio, requiere entrenamiento, no se puede correr un maratón el primer día que sales a correr.
Así también será difícil ayunar por varios días si no has entrenado para eso.
Pero podemos comenzar poco a poco. Omitiendo la carne en las comidas, el refresco o el café. Luego puedes saltarte una comida cada tercer día y solo tomar agua. Y así, poco a poco estarás entrenado y ejercitándote espiritualmente.
Cuando dejas de comer, lee tu Biblia y ora. Dejar de depender de algo tan primordial para la vida y buscar a Dios es la manera como podrás ejercitarte espiritualmente.
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